Cocinamos con y para niños. Patatas a la importancia

Parece que el pollo le ha cogido el gusto por ayudar en la cocina y sin tenerlo previsto esta misma tarde me ha preguntado si no íbamos a cocinar juntos de nuevo. Así que me he animado a participar en el reto que Aneto nos lanza este mes.

El mes de febrero trata sobre platos tradicionales.

La verdad, nosotros somos de un pueblo de la provincia de Alicante y buscando posibles recetas me he dado cuenta que me falta muchísimo por aprender de mi tierra. De hecho tras mucho buscar he encontrado un libro que sabía que tenía pero que tras la mudanza no tenía ubicado.

Le he estado echando una ojeada y al final he decidido no arriesgar y dejar una posible receta que me encanta para un reto próximo, más que nada para tener tiempo a preguntar a mi tía para que me aconseje.

Así que pensando en platos tradicionales me he ido a la otra parte de la familia y he recordado las riquísimas Patatas a la importancia de "la yayi" ( es la abuela del pollo) y he estado un rato al teléfono charlando con ella y de cómo las hace (es una experta en los fogones).

Las patatas a la importancia es un plato típico de la provincia de Palencia, originario de la postguerra. Aunque a día de hoy es un plato ya conocido en toda España. Su nombre puede dar lugar a pensar que es un plato elaborado, pero justamente es todo lo contrario.

Así que aquí os dejo la receta de las patatas a la importancia (receta de "la yayi").

Ingredientes

• Patatas medianas
• Cebolla
• Ajo
• Perejil
• Caldo de puchero Aneto
• Harina
• Huevo
• Aceite
• Pimienta
• Sal

Preparación

Pelamos las patatas y las cortamos en rodajas de más o menos un dedo de grosor. Las tapamos con un papel absorbente para quitarles el exceso de humedad. Las salpimentamos. Batimos el huevo. Enharinamos las patatas y las pasamos por el huevo para freírlas en una sartén (de esta parte me encargué yo).

Las freímos vigilando bien que el rebozado no llegue a quemarse, la verdad es que el nuestro quedó quizá tostado de más). Retiramos las patatas de la sartén y las dejamos sobre papel para quitar el exceso de aceite.

A continuación preparamos la salsa verde. Para ello picamos el ajo y la cebolla (el pollo ha picado la cebolla con gafas de bucear, palabrita). Aprovechamos un poco de ese aceite anterior y pochamos los dos cosas. Cuando lo veamos bien blandito echamos el perejil previamente picado y lo dejados hacer. A continuación echamos una cucharada de harina para espesar un poco el preparado. Doramos un poquito y pasamos a verter el caldo de puchero ( me encanta su sabor, es espectacular). Lo dejamos hervir durante un rato para que vaya cogiendo cuerpo.

Para finalizar metemos en la cazuela las patatas que habíamos hecho anteriormente y dejamos cocer el conjunto hasta que las patatas estén bien blanditas. Y ya está, eso es todo.

Se puede tomar como plato único o como acompañamiento de algún tipo de carne. Están fabulosas y son supersencillas de preparar.

¿Os atrevéis a realizarlo? Espero vuestros comentarios. Hasta el próximo reto.